En la profundidad del bosque había dos ardillas muy traviesas. Se llamaban Flor y Blanca. Les hacían bromas a los demás animalitos.
Un día decidieron hacerle una broma. Fueron todos de picnic y llamaron a un lobo amigo suyo para hacerles una encerrona.
Para comerselas de mentira y se dieron un buen susto.
Tal miedo pasaron que nunca más volvieron a hacer más bromas y pidieron perdón.
FIN. AUTORA: EVELIN.
qué bonito escribes Evelin!!!
ResponderEliminarla mamá de Ricardo :-)